Lucía de la Fuente Quintana
Aunque nací en Antequera, mi ciudad de infancia y estudios ha sido Granada. En la Universidad de esta ciudad me licencié en Derecho y Psicología, y durante aquellos años disfruté de una Beca Erasmus en la Universidad de Cardiff (Reino Unido). Mi experiencia laboral como psicóloga en los Juzgados de Menores de Palma de Mallorca y Murcia (tras aprobar una oposición como psicóloga-personal laboral del Ministerio de Justicia) hizo renacer mi interés por el mundo del Derecho y pedí una excedencia para opositar al cuerpo de Notarios. Una decisión difícil y una meta dura, que me costó seis años y nueve meses conseguir. Hoy puedo decir con orgullo que me gusta ejercer mi trabajo; no hay mayor satisfacción que la de ver salir a un cliente agradecido por la atención recibida en la notaría y oirle manifestar que entiende la documentación que está consintiendo en mi presencia.
Antes de recalar en esta isla, estuve ejerciendo en Iznájar, y acometí la sustitución de la notaría de Benamejí. De ambas notarías y su clientela guardo un recuerdo y experiencia inolvidable, pilares de mi ejercicio profesional actual.
Desde el año 2010 me instalé en San Fernando, destino que elegí voluntariamente, buscando un nuevo paraiso para vivir. Aquí lo encontré. Y aunque llevo todas las ciudades que he nombrado en el corazón, al llegar aquí me topé con una tierra que abraza, un mar que da libertad, y una gente que engancha. Todo regado con sol y mucho viento (esto último lo llevo peor).
Isleña me hice, isleña eligo ser.